domingo, 27 de enero de 2013

PARA LOS PADRES: Violencia


“Es fundamental recordar que un alto índice de violencia verbal pronostica actos de violencia física a corto o medio plazo”
La violencia es una conducta aprendida y no cambia espontáneamente por la voluntad o las promesas.

Recursos para los padres

Los padres se encuentran con un desafío diario en el control de la conducta de su hijo. Hay errores comunes, como la falta de elogio de una conducta positiva, las dificultades para mantener una norma disciplinaria o la falta de límites. Utilizad refuerzos positivos, gratificantes simples ante la buena conducta. Y que ambos padres acuerden las mismas normas. Que no se contradigan ante el niño ni se desautoricen el uno al otro. Se pueden usar los castigos, siempre en el mismo momento de cometida la falta, y no deben necesariamente prolongarse en el tiempo.

Brindar varias opciones; escuchar sus gustos y darles la posibilidad de elegir. Enseñar a compartir actividades y juguetes, estimular el compañerismo y la solidaridad entre hermanos, para que el niño pueda trasladar esta conducta a otros ámbitos. Poner límites entre los hermanos, enseñar al niño a respetar a su hermano, sus juguetes y juegos. Transmitir al niño la capacidad de “esperar”, como un modo de interiorizar la tolerancia a la frustración; es decir, como una manera de enseñar al niño a esperar el resultado o a esperar ver su deseo cumplido, que no todo es “ya”, que debe esperar el momento o que debe esperar su turno.
Mirad al niño a los ojos antes de darle una orden. Haced que cumplan vuestras órdenes, así les transmitiréis que siempre que se da una orden esta debe ser cumplida.

Exceso de violencia en la tele y en los juegos de ordenador

La influencia negativa de la televisión y la falta de diálogo familiar parecen ser los grandes responsables de la agresividad de niños y niñas. La labor consciente y responsable de los padres resulta clave para solucionar este preocupante problema. Los padres que fomentan el diálogo familiar no tienen por qué preocuparse. Probablemente, sus hijos controlarán la agresividad, la canalizarán y la harán salir fuera de un modo más constructivo. En este caso, las películas agresivas no modificarán su comportamiento: serán solo un pasatiempo.

Consejos para tener en cuenta

-    Dosificar las horas de televisión.
-  Enseñarles a diferenciar lo bueno de lo malo, la realidad de laficción, lo absurdo de lo posible.
-     Despertar en ellos el sentido crítico.
-     Procurar mantener a los niños al margen de las peleas familiares y los conflictos de pareja. No hay nada peor para ellos que presenciar actitudes violentas entre aquellos a los que quieren.

No hay comentarios:

Publicar un comentario